JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

Los responsables del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) del Cabildo de Tenerife y el comité de empresa único escenificaron ayer el acuerdo al que habían llegado la semana pasada, acerca del plan de viabilidad que pondrá en marcha en las próximas semanas el organismo autónomo.

El vicepresidente primero y consejero de Asuntos Sociales de la Corporación insular, Aurelio Abreu; la consejera delegada del IASS, Margarita Pena; el gerente del instituto, Santiago Marrero; y el presidente del comité de empresa, José Luis Gutiérrez, explicaron en rueda de prensa el complejo proceso que ha llevado a suscribir un acuerdo que permitirá un ahorro cercano a los 400.000 euros.

Ahora, sin embargo, está por ver cómo consigue la Gerencia recortar los otros 256.000 euros que faltan para llegar a los 656.000 euros en los que se estableció el ajuste total del organismo para el presente ejercicio. A este respecto, Santiago Marrero explicó que la entidad continúa estudiando la “reorganización de algunos servicios externos” que prestan ONG y otras entidades, principales damnificadas de los próximos recortes. De hecho, este periódico ya publicó que el IASS tiene previsto reducir a una sola el trabajo con menores en riesgo que actualmente desarrollan cinco organizaciones. La medida se aplicará a partir de septiembre, pero aún se desconocen las bases de la convocatoria que determinará la concesión para el periodo comprendido entre octubre de 2012 y diciembre de 2013.

“Estábamos obligados a contener el gasto, no sólo por imposición de nuestro órgano matriz, el Cabildo, también por los recortes que está haciendo el Gobierno”, señaló la responsable del instituto, Margarita Pena.

En la misma línea se manifestó el gerente del IASS, Santiago Marrero, que aseguró que los ajustes sólo afectarán a la bolsa de productividad y las gratificaciones que recibía el personal al jubilarse. “En un contexto como el actual, de gran incertidumbre, se garantizarán todos los puestos de trabajo y la prestación de los servicios”, agregó Marrero.

Una opinión que suscribió el presidente del comité de empresa, José Luis Gutiérrez, que agradeció a Aurelio Abreu que desbloquease la negociación cuando estaba más enquistada. Para Gutiérrez, se trata de un acuerdo asumible para los trabajadores, porque se asegura la contratación de categorías básicas para sustituciones, lo que permitirá seguir prestando servicios básicos a colectivos como los mayores, dependientes y menores en exclusión”. “Se crea un escenario estable para el personal, algo que no se había logrado en los ocho años que llevo como presidente del comité de empresa”, recalcó Gutiérrez.

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Largo proceso negociador

El proceso de negociación del plan de ajustes entre el comité de empresa y los responsables del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) ha sido bastante tortuoso. A pesar de que los recortes se decidieron en noviembre del pasado año, las conversaciones con los trabajadores no se iniciaron hasta el pasado mes de febrero. Sin embargo, tras la llegada a la Gerencia de Santiago Marrero, y debido a las discrepancias entre éste y la consejera delegada del organismo, Margarita Pena, la negociación quedó en punto muerto. De hecho, el comité de empresa realizó varias acciones de protesta, ya que incluso se especuló con la posibilidad de que el IASS presentara un expediente de regulación de empleo, una medida que el Cabildo aplicó en entidades como Titsa.

Finalmente, la mediación del vicepresidente primero y consejero de Asuntos Sociales, Aurelio Abreu, hizo que se desbloqueara el conflicto y, de paso, evitó que el gerente, que había presentado su renuncia, dejase el instituto. Ayer, juntos en la misma mesa, todos los actores de este singular serial escenificaron la aprobación de un acuerdo que ha permitido salvar un millar de puestos de trabajo directos -personal fijo e interinos-. El IASS, sin embargo, sigue necesitando al menos otros 256.000 euros para asegurar su viabilidad a corto plazo, ya que su deuda sigue superando los 17 millones de euros, lo que hace que su futuro continúe siendo una incógnita.

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