RECORTES > SANIDAD

Sanidad baja los conciertos y prepara nuevas licitaciones

La consejera de Sanidad del Ejecutivo, Brígida Mendoza, durante una comparecencia en el Parlamento. / DA

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

A escasas horas de que el Parlamento de Canarias dé su visto bueno al Plan Económico-Financiero de Reequilibrio de la Comunidad Autónoma, muchos departamentos ya trabajan en las medidas de ajuste que se pondrán en marcha en las próximas semanas.

Una de las áreas donde se producirán más cambios es en sanidad, ya que el Ejecutivo que dirige Paulino Rivero pretende ahorrar más de 26 millones de euros en la optimización de la gestión de los recursos humanos y otros 46 millones reduciendo los gastos de los servicios contratados y otras mejoras organizativas. Entre los ajustes se incluye la reducción un 10% (más de 20 millones de euros) de los conciertos con la sanidad privada, así como la promoción de nuevas licitaciones en los mismos, “evitando las prórrogas automáticas y buscando precios más ventajosos”, según reza el documento.

Según explican desde la Consejería de Sanidad del Ejecutivo autonómico, “se instaura esta medida teniendo en cuenta que la concertación forma parte de la medicina pública, como recurso para dar respuesta a necesidades de los usuarios y, como tal, está sujeta también a las medidas de ajuste presupuestario”.

Los recortes en este ámbito, sin embargo, no son nuevos, como reconocen desde la propia Consejería y las clínicas privadas, que ya llevan dos años recibiendo menos pacientes procedentes de la sanidad pública. Es el caso de USP Hospitales, que posee conciertos con el Servicio Canario de la Salud (SCS) en cirugía, crónicos y rehabilitación. Según explican a este periódico, “llevamos tiempo reorientando nuestra actividad por los recortes”. “Y una reducción del 10% sin duda afectará, pero habrá que ver en qué términos”, inciden en USP. En la misma línea se han manifestado desde Hospiten, al señalar que “se ha notado de forma significativa la disminución del número de pacientes. En 2011 ya cayó la actividad con el Servicio Canario de la Salud un 10%, pero en estos primeros seis meses del año ya se ha superado este porcentaje”.

“El objetivo es mantener la mayor parte de los conciertos en los mismos términos, pero siempre ciñéndonos a lo presupuestado”, recalcan desde el Gobierno de Canarias, donde incluso señalan que “también se pretende que el recorte salarial sufrido durante el último año por el funcionariado -por imposición del Gobierno central- tenga su reflejo en la privada”.

Hay que recordar que la partida que se destinó en los Presupuestos Generales del pasado año a asistencia concertada (artículo 25 del presupuesto de gastos del Servicio Canario de la Salud) fue de 178.516.845 euros, 13,2 millones menos que el año 2010 y casi 15 menos que en el ejercicio 2009. Paradójicamente, según los datos facilitados a este periódico por Sanidad, el porcentaje de crédito destinado en 2011 a la concertada, en relación al presupuesto total, fue el mayor de los últimos cinco años, ya que supuso el 7,08%.

No obstante, esta cifra no incluía lo que las gerencias de Atención Primaria destinan a convenios con las universidades canarias para pagar a los profesores vinculados, así como a otros contratos de prestación de servicios, entre los que se encuentran los de hemodiálisis en centros hospitalarios y no hospitalarios, la oxigenoterapia en domicilio, la resonancia magnética, la medicina nuclear y otros servicios de asistencia sanitaria que no se pueden prestar con medios propios, que también han sufrido recortes en el presente ejercicio de 2012.

Los números que ofrece la Consejería, curiosamente, contradicen las críticas vertidas por los sindicatos del sector y del Foro Social Canario por la Salud y la Sanidad Publica, que recientemente alertó del “peligro” que supone para la sanidad pública los conciertos con las entidades privadas, que, según aseguran, en el 2011 ascendieron a 200 millones de euros, mientras en la pública se recortaron alrededor de 400 millones.