J. F. J. | La Laguna

El futuro del bloque de viviendas Francisco Javier Centurión, en el barrio San Honorato, se mantiene envuelto en la incertidumbre, siete años después de ser declarado en estado ruinoso y desalojados sus inquilinos.

El Ministerio de Fomento ha dejado sin financiación para este ejercicio el proyecto de reposición de a este conjunto residencial en el que tenían su casa 56 familias y el Ayuntamiento de La Laguna aún no ha puesto fecha a su necesario derribo, una intervención que está valorada en algo más de 300.000 euros y de la que depende la seguridad de la zona. Tal es así, que el Consistorio ha tapiado todos los accesos a los bloques y ha inhabilitado al tráfico rodado la calle que pasa justo por delante del conjunto de viviendas.

Si es grave la situación de Las Chumberas, cuya intervención sigue sin estar clara cuatro años después de haberse detectado aluminosis en su estructura, la del Centurión seguramente lo sea todavía más. A través de la empresa municipal de vivienda, Muvisa, las arcas municipales son las que están asumiendo el coste del realojo de sus vecinos en viviendas de alquiler, a la espera de que el proyecto de reposición sea dotado de la financiación necesaria; se complete la obra del nuevo edificio y las familias que lo habitaban puedan, por fin, disfrutar de las viviendas a estrenar que les prometieron.

A este paso, sin embargo, da la impresión de que todavía pasarán algunos años hasta que sea una realidad. Salvo cambios de planes, la nueva edificación se levantará en un solar cercano a su ubicación de origen, que era propiedad del Gobierno canario. La intervención tendrá un presupuesto total de 7,4 millones de euros, de los que el Ministerio de Fomento debe aportar el 24,63% y las administraciones canarias, 75,37% restante (unos 5,6 millones de euros).
La inversión que le toca al Ayuntamiento de La Laguna se estima en unos 2,6 millones de euros. El objetivo final es que la operación tenga coste cero para los vecinos.

Estas viviendas, hoy deshabitadas y a la espera de su demolición, fueron edificadas a finales de los años 50 por la Obra Sindical del Hogar. En 2006 se detectaron los primeros problemas en su estructura y, poco a poco, se fueron produciendo los desalojos de sus habitantes, hasta que finalmente ha quedado vacío. Es la historia de otro proyecto de reposición urbanística previsto en el municipio de La Laguna que se eterniza en el tiempo.