EFE | La Coruña

La comisaria europea de Pesca, María Damanaki, defendió ayer el acuerdo de pesca firmado entre la Unión Europea y Mauritania, en el que se limita la actividad extractiva por falta de stock, mientras que el ministro español de Agricultura, Miguel Arias Cañete, pidió que se renegocie, atendiendo a los últimos informes científicos.

El convenio con Mauritania, en virtud del cual se impide la pesca a los cefalopoderos (pulpo y calamar) limita mucho la actividad marisquera, y ha provocado que la mayor parte de los buques españoles -de Andalucía, Canarias y Galicia- hayan abandonado este caladero africano.

“Sé que para España este acuerdo no es satisfactorio”, reconoció, quien se comprometió a trabajar para encontrar “soluciones” que permitan compensar a la flota afectada.

No obstante, la comisaria europea insistió en que el convenio viene determinado por las estimaciones sobre el estado del caladero realizadas por las autoridades de Mauritania. “Debemos entender que no podemos pescar en las aguas de otros países sin respetar sus reglas y sus evaluaciones sobre sus stocks”. De cara a 2013, avanzó la situación puede mejorar y se podría permitir de nuevo la actividad pesquera.