GABRIELA GULESSERIAN | Los Realejos

El temporal de lluvia y viento acaecido la semana pasada en la Isla dejó secuelas en las instalaciones municipales de Los Realejos, entre las que se vieron especialmente afectadas las de tipo deportivo.

En la mañana de ayer, los técnicos municipales de la Unidad de Obras y Proyectos concluyeron su ronda de visitas por las distintas infraestructuras para valorar los daños. A falta de concretar las cifras con la cuantía de éstos, cuentan con un balance de los desperfectos, que se remiten a las aseguradoras de los edificios públicos.

El techado del campo de fútbol de Palo Blanco fue uno de los inmuebles que más daño sufrió dado que cayó sobre el polideportivo del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Palo Blanco, anexo al recinto. Además, se da la circunstancia de que hace un año este último también fue cerrado debido a deficiencias en su estructura.

En el estadio Antonio Yeoward, en el Toscal-Longuera, se registraron desperfectos en la cantina y en varios campos de fútbol de césped artificial éste se levantó debido a las fuertes rachas de viento. En lo que respecta a la piscina municipal y al pabellón de deportes, hubo destrozos en la cristalería y en los techos. En esta última instalación la situación se complicó debido a que las fuertes lluvias ocasionaron goteras.

También hubo daños en bancos, contenedores y papeleras en la vía pública y en la plaza de San Sebastián cayó gran parte de la arboleda, con especies muy antiguas, por la fuerza del viento.