EFE | Cádiz
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha asegurado hoy que Alemania tendrá que elegir “muy pronto” entre una emisión masiva de dinero, que ha definido como una nueva República de Weimar, o una “mutualización” de la deuda de los socios europeos.
Durante una conferencia en el XVIII Foro Eurolatinoamericano de Comunicación que se celebra en Cádiz, dentro de las actividades previas a la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, el ministro ha mostrado su convencimiento de que Alemania, cuyas cifras “ya no son tan buenas”, optará por la “mutualización” de la deuda con mecanismos de control.
Ha insistido en que Alemania tendrá que tomar “muy pronto” esta decisión porque “puede haber acontecimientos en algún país”.
En este contexto, ha advertido de que la situación de Grecia es “muy delicada” y “desesperada”, porque “necesita 31.000 millones de euros para levantar las persianas, abrir hospitales o pagar salarios”.
Preguntado por Grecia y tras advertir que iba a contar lo que puede contar, el ministro ha señalado que lo que ocurre en ese país puede derivar en una situación institucional “muy complicada” y ha añadido: “No sé lo que ocurre en Grecia pero prefiero no pensarlo”.
García-Margallo ha insistido en que la crisis europea no es sólo económica sino “política” y ha añadido que Europa “tiene que avanzar” y “dar el salto a una unión federal” porque si no “pasará a una situación de irrelevancia”.
Para el ministro es urgente que Europa defina “ahora” su modelo, que tiene que pasar por que los países pierdan “grasa acumulada”, aunque “es verdad que no a la velocidad que se nos exige porque no se pueden perder quince kilos en una semana”, y por la creación de mecanismos de control que impliquen cesión de soberanía.
Además, el modelo debe tener a juicio del ministro “un Fondo Monetario Europeo o el nombre que quieran ponerle” que acuda al rescate de los países que lo necesiten “con una financiación propia llamada eurobonos” y responsabilidad mancomunada.
Los eurobonos “permitirían crear un mercado de obligaciones tan amplio y tan profundo como EEUU” y “en otra fase pasarían a ser unos bonos solidarios”.
El ministro, que ha reconocido que él no es “un fanático de las políticas de austeridad”, ha insistido en la necesidad de que la UE ponga en marcha política porque las dificultades que se viven “pueden hacer aflorar fenómenos populistas que pueden crear problemas en corto”.
Para García-Margallo, Europa debe preocuparse también por no perder “posiciones” respecto a América Latina, “que tiene una posición de futuro” y unas relaciones en las que España y Portugal pueden jugar “un papel muy activo”.