JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
Apenas una hora después de que el consejero de Economía del Gobierno canario, Javier González Ortiz, presentara los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma en el Parlamento, el presidente del Ejecutivo, Paulino Rivero, se reunía con los rectores de ambas universidades, a los que explicó personalmente los recortes que padecerán las dos instituciones académicas.
Al respecto, el rector de la Universidad de La Laguna (ULL), Eduardo Doménech, explicó que, a nivel global, el presupuesto para las universidades cae el 8,34%. “Además, en el capítulo de inversiones nos quedamos a cero, y perdemos un 5% en la financiación básica de los capítulos I y II, lo que supone más de cinco millones de euros menos”, denotó Doménech, quien mostró su descontento por el hecho de que “en el conjunto de la comunidad autónoma el presupuesto baja el 6,7%, mientras que a nosotros se nos hace un recorte mayor que el promedio que aplica el Gobierno”.
En este sentido, Doménech cree que se debería hacer un esfuerzo con las universidades, sobre todo en lo que se refiere a financiación básica, donde el rector de la ULL cree que el recorte máximo debería ser de un 4%. “El presidente nos ha dicho que ahora serán los grupos parlamentarios los que tengan que decidir, pero nos ha avanzado que será difícil incrementar las partidas”, confesó Eduardo Doménech. No obstante, el máximo responsable de la universidad tinerfeña reconoció que Paulino Rivero les prometió que si las tasas no evolucionan como el Gobierno prevé, “a mitad de año se podría hacer un ajuste adicional de los presupuestos de las universidades”.
Sin embargo, ello no implicaría más ingresos, ya que, por ejemplo, en la ULL ha habido más de un millar de matrículas menos que el curso pasado, “por lo que parece complicado que se logre más dinero a través de ese concepto”.
Pese a todo, Doménech dejó claro que los rectores “lucharán” para que no haya despidos. “En la ULL estamos haciendo ajustes, como el cierre de centros, no cubriendo las jubilaciones, negociando a la baja los contratos de agua y luz y buscando mayor eficiencia en el consumo energético. Si somos capaces de disminuir esos gastos, tendremos el soporte necesario para no tener que despedir a la plantilla del personal docente investigador ni del personal de administración y servicios”, destacó el rector, quien anunció que muchos alumnos dejarán la universidad si no logran la beca que han pedido.