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Trabajadores del servicio de lavandería inician un encierro en el HUC

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Trabajadores del servicio de lavandería se encerrarán en el HUC. | DA

J. L. C. | Santa Cruz de Tenerife

La más que probable privatización del servicio de lavandería de los hospitales tinerfeños, desvelada por este periódico el pasado martes, continúa generando polémica. Ayer, más de un centenar de trabajadores del citado servicio iniciaron un encierro indefinido en el Hospital Universitario de Canarias (HUC), en protesta por las intenciones de la Consejería de Sanidad, una propuesta que según ellos está “injustificada”.

En este sentido, desde Intersindical Canaria (IC) explicaron que, aunque la administración habla de “externalizar” la mitad de los más de 10.500 kilos que actualmente lava el servicio, el sindicato está convencido de que, a corto plazo, “habrá una segunda fase de privatización para clausurar totalmente las instalaciones y despedir a la totalidad de la plantilla”. “Hacemos esta afirmación ante el hecho de que lavando sólo la mitad de la ropa como ahora pretende la Consejería, el servicio entonces sí que perdería viabilidad por el aumento de los costes”, recalcaron las mismas fuentes.

“El servicio se encuentra actualmente en perfecto rendimiento y fue objeto hace cinco años de una inversión en maquinaria que superaba el millón de euros. Además, en las instalaciones trabajan unos 120 trabajadores pertenecientes a los dos hospitales, que a medio plazo perderán su empleo”, insistieron desde Intersindical Canaria. En la orilla opuesta, la Consejería de Sanidad aseguró que las gerencias del Hospital de la Candelaria y del Hospital Universitario, en un “ejercicio de transparencia”, se reunieron la pasada semana con las juntas de personal, comités de empresa y plantillas para informarles de los estudios realizados sobre los costes de la lavandería, que evidencian un “desfase” con la situación de otros hospitales que tienen externalizado este servicio. “Presentaron una serie de propuestas para incrementar la eficiencia, como la reestructuración de los turnos de trabajo o la recolocación del personal que no permanezca en la lavandería en vacantes de su mismo grupo profesional”.