MALDITO PARNÉ

Las cuentas claras

Madrid acaba de presentar los presupuestos generales del Estado para el próximo año. Unas cuentas que, si bien se aprueban bajo la sombra de las elecciones generales, no son lo suficientemente expansivas que deberían. En un principio, y con más recaudación por el crecimiento económico, parece que Canarias sigue sin recibir lo que se merece. Así al menos lo dicen todos los partidos políticos. A falta de un análisis exhaustivo del proyecto de ley, las partidas de gasto e inversión para el Archipiélago resultan insuficientes, sobre todo teniendo en cuenta que la tasa de desempleo en las Islas es de las más altas de España. Pero más allá de la carencia de fondos en las cuentas estatales para Canarias, lo que también revelan estos presupuestos es que las relaciones con el Estado no se han arreglado. Ni mucho menos. Es cierto que habrá que esperar a diciembre y a los futuros pactos para ver cómo queda el panorama político estatal. También es cierto que al presidente canario le hubiera gustado otro tipo de pacto. Quizás más en línea con el del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Pero, aún así, Coalición Canaria (CC) hace bien en no iniciar una nueva guerra contra el Estado. Empieza ahora una negociación dura. Difícil. Un trámite largo en el que Canarias tiene que saber reclamar lo que le corresponde. La situación de las elecciones generales y la necesidad del Partido Popular de contentar a todos jugarán en favor del Ejecutivo canario, que podrá negociar un Régimen Económico y Fiscal (REF) fuerte y capaz de incentivar la economía regional, y una inversión por habitante más acorde con la media nacional. Los nacionalistas insisten en que la mejora de la economía que anuncia el PP para el conjunto del Estado no se ha visto reflejada en ningún caso en las partidas destinadas a las Islas. Tampoco compensan al esfuerzo que durante estos años de crisis ha realizado la sociedad canaria. Los más de 94 millones de euros incluidos en el convenio de carreteras se sitúan muy lejos de los 207 millones programados para 2016. La reducción de la partida del convenio de aguas hasta los 18 millones de euros o la raquítica subvención para la desalación de aguas son cifras que preocupan al Gobierno. La escasa partida para la aplicación del Plan Integral de Empleo tampoco ayuda. Sin duda, el PP mejorará estas cifras durante la tramitación del proyecto de ley. Siempre se hace. Hay un margen de dinero guardado en la chistera para poder negociar. Ahora, lo que es importante es que el Ejecutivo canario aproveche esta situación y deje las cuentas claras.

@MariaFresno72