ENTRE NOSOTROS

Turismo Integral Canario (3)

Como aquí en mi pueblo, por eso somos pueblerinos, nos creemos más listos que Harry Potter, pues cada cual ha interpretado a su manera las declaraciones de don Fernando Clavijo al periódico El País, por cierto, quién coño le habrá aconsejado que se fuera tan lejos para hablar del turismo canario.

Y cómo también las deducciones son para que cada cual las interprete según le vaya la fiesta, miren por dónde, el presidente del Gobierno canario me lo ha puesto a huevo. Porque precisamente hoy, en el ensayo-teórico-sectorial sobre el Turismo Integral Canario, tocaba hablar del papel institucional en el sector. Por supuesto que el señor Clavijo ha puesto el dedo en la llaga al hablar de limitar las entradas de turistas y de tasa. A partir del debate abierto, los políticos intentarán mojarse lo menos posible, para no tocar las bolsas de las campañas electorales; los empresarios procurarán que sus beneficios queden intactos o mejorados; los sindicatos permanecerán callados como putas para no joder los apoyos extras de la patronal; los periodistas alimentados con las cuñas publicitarias y donativos empresariales, se enfrentarán a todo lo que signifique deteriorar la imagen de los empresarios y multinacionales; y un servidor, que va por libre y sin deber favores a nadie, me importa un carajo quién se joda o no, pero aquí hay que tomar medidas drásticas, de salvación y reconversión de un turismo que, o lo regulamos nosotros, o los turistas nos echan de aquí.

Sin ir más lejos, el otro día escuché a un vocero de radio, que tiene mucho que ver con este asunto, decir que todavía hay espacio para ocho millones más de turistas; a este charlatán habría que mandarlo a la Siberia de Lenin. Y mi querido y apreciado Pepo, déjame que te diga que los puestos de trabajo perdidos en el sector no ha sido por la crisis -es cosa de aprovechados-; te lo explicaré en el próximo y último artículo del ensayo-teórico-sectorial Turismo Integral Canario. Ahora me despido: ¡hasta más ver!