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Bienvenido Hu Jintao > María Fresno

Un informe publicado esta semana en ABC, elaborado por Roland Berger, desvelaba que los países emergentes necesitan inversiones en infraestructuras por valor de 675.000 millones de euros. Por país emergente se entiende aquel que, actualmente, tiene capacidad de desarrollo. Desarrollo, por ejemplo, en telecomunicaciones, transporte, suministro eléctrico, agua y alcantarillado, donde Canarias tiene sobrada experiencia.

Entre 2005 y 2010, el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en África, Oriente Medio y América Latina llegó al 4% anual; en Asia creció el 5% y en Europa tan solo el 0,8%. Está claro. La vista hay que ponerla en Asia y África. El dinero se está moviendo. Está ahí fuera, y Canarias no puede perder esta oportunidad. Salvo contadas excepciones, como la reciente visita del presidente de China, Hu Jintao, Canarias vive de espaldas al mundo económico. En un momento como el actual, es casi un deber mirar al exterior y aprovechar todas y cada una de las oportunidades para activar nuestra economía y relanzarla. China, Oriente Medio o Latinoamérica son territorios que están en pleno crecimiento económico y por los que la crisis ha pasado de refilón.

Hu Jintao vino esta semana a Tenerife. Su visita no se limitó solo a ver las excelencias del Parque Nacional del Teide. Tuvo mucho más valor. El interés de Hu Jintao por las Islas va más allá. Canarias es el territorio europeo más desarrollado y estable políticamente, cercano a África. Está claro que el continente africano esta en pleno crecimiento económico, pero los chinos también lo han pensado antes. Ahora, lo que tienen que hacer los empresarios y la administración canaria es tomárselo en serio y apostar por estos países. El turismo está bien. Es nuestro sector estrella. Da empleo e ingresos, pero la economía de Canarias no puede depender únicamente de esta industria. El Archipiélago necesita dinero fresco. Y éste solo va a venir del exterior. Ahora más que nunca, el Gobierno debe olvidarse de pedir a Madrid y de llorarle a Europa, y crear un lobby empresarial lo suficientemente sólido y fuerte para salir al exterior y vender nuestras excelencias. Estamos a escasos kilómetros de África. Los puertos canarios están preparados. Las infraestructuras canarias, están preparadas, pero ¿están listos los canarios?

Hu Jintao no vino a hacer turismo. Vino a negociar. Así que, bienvenido mister Hu Jintao.