EFE | Santa Cruz
Un estudiante de Ingeniería en Obras Públicas de la Universidad de La Laguna ha presentado como proyecto de fin de carrera un sistema de defensa costera abatible en superficie que evita que el oleaje atraviese la avenida marítima y llegue a zona poblada, especialmente diseñado para San Andrés, en la capital tinerfeña.
El alumno es Alejandro Sánchez Afonso, quien obtuvo un diez con este proyecto, explicó hoy a Efe el profesor Manuel García Román, tutor del trabajo quien comentó que ahora se intentará patentar algunos de los aspectos del trabajo, como el sistema de impermeabilización.
Manuel García Román indicó que si bien la asociación de vecinos del barrio de San Andrés conoce la propuesta la corporación municipal no.
El sistema, ha informado la Universidad de La Laguna, consiste en paneles formados por perfiles de aluminio estructural aligerado y madera estructural, dispuestos en capas y sistema de juntas que garantizan la estanqueidad del conjunto.
Tiene gran resistencia pero los paneles son lo suficientemente ligeros para poder montarlos y desmontarlos a mano, con lo que se evita el uso de sistemas automáticos que puedan fallar ante una eventual caída del suministro eléctrico.
El coste de instalación de la barrera, que puede ser integrada en el proyecto de remodelación de la avenida marítima que comenzará a ejecutarse en San Andrés está presupuestado en 780 euros por metro lineal, algo más en los puntos donde se cruza con las calles.
El coste, se señala en un comunicado de la Universidad de La Laguna, es extraordinariamente inferior al de cualquier infraestructura marítima de protección que se ejecute fuera de la línea de costa.
La superficie de los paneles una vez plegados formaría parte del revestimiento de la acera más interior de la avenida marítima, y su aspecto sería el de una tarima.
Los detalles técnicos del sistema no se pueden conocer debido a que se analiza su posible protección como propiedad industrial mediante patente.
La solución propuesta por Alejandro Sánchez Afonso es similar a las barreras desmontables de protección contra crecidas fluviales que se utilizan en muchos lugares del mundo, aunque en este caso adaptada a las características del entorno costero, en el que se dan unas componentes dinámicas que no se producen en el entorno fluvial.
Para redactar el proyecto, del que son tutores los ingenieros Juan González Fariñas y Manuel García Román, profesores de la Universidad de La Laguna, Sánchez Afonso también tuvo en cuenta condicionantes sociales como mantener los acceso al pueblo o la exigencia de los vecinos de conservar la vista al mar, de tal modo que la barrera es imperceptible cuando está plegada.
Las características geográficas y topográficas de esa zona ocasionan que cada cierto tiempo se produzcan inundaciones por la combinación de marea alta y oleajes, principalmente de dirección sur, que provocan rebases de agua sobre el muro costero de la avenida marítima que llegan a impactar contra el frente de los inmuebles, ocasionando pérdidas económicas y poniendo en peligro a los ciudadanos, explica la Universidad.