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¿Habrá algo más estúpido que la fiesta de Halloween?

No sé si ustedes opinarán lo mismo que yo, pero, ¿habrá algo más estúpido y más fuera de nuestras tradiciones que la fiesta de Halloween, que ahora hace fortuna en nuestra sociedad?

Esta celebración celta no es nuestra; lo nuestro no son las brujas, sino todos los santos, el enrame de los cementerios -en Valencia, sin cruces porque lo dice la izquierda bobalicona- y la representación del Tenorio. Tengo una amiga, Nieves González, que es una excelente actriz y que este año tiene un papel en esta representación. O sea, que contento.

Además, soportar a una legión de chiquillos que tocan el timbre de tu casa para pedir caramelos es horroroso; te dan ganas de echarles el perro, aunque si yo les echo a Mini, mi yorkshire, se echarían a reír, no a correr. Vaya coñazo de niños pedigüeños de Halloween.

Paulino Rivero controlaría, en este momento, más de 35.000 acciones del CD Tenerife. Quiere ser presidente, pero con una serie de condiciones. El Tenerife tiene unos 174.000 títulos de unos 30.000 accionistas -hasta yo lo soy, con tres acciones-; del entorno de Miguel Concepción me dicen que controla un 37% de ellas. En fin, que si Miguel quiere, pone a Paulino en la presidencia.

A Paulino yo creo que le hace ilusión la responsabilidad de presidir el club y hará reformas en su estructura. Él sabe, por su amistad con Javier Pérez, paz descanse, que hay que trabajar en los despachos, pero que, al final, todo depende de que la pelotita traspase la línea de gol muchas veces. Este es el secreto y no otro.

El PP está hecho un lío con las listas al Congreso y al Senado en Canarias. El único seguro es Soria, que llevará de número 2 o a Matilde Asiaín o a Mari Carmen H. Bento. En Santa Cruz de Tenerife, Pablo Matos seguro al Congreso como número uno. Y Alarcó, seguro al Senado. Alarcó asombra en las encuestas: será el senador más votado de Canarias. Águeda Fumero puede ser número 2 de Matos; o sea, las mismas caras. Alarcó me da a mí que prefiere el Congreso, porque le va la marcha y quiere trabajar más de lo que trabaja, que es mucho, pero irá al Senado, repito. CC lo tiene claro y decidido: Ana Oramas de cabecita y de dos, Carlos Alonso.

Que ni chiquitos líos está armando Juan Pedro Dávila, exdirector general de Agricultura, criador de cochinos y ahora asesor del consejero, con los ganaderos. Han pedido que dimita, pero ni de coña. Un asesor gana sus perritas y hay que llevar algo a casa. El mundo se mueve por el vil metal. ¿Y no se han fijado ustedes en los mochileros oficiales del régimen? La fernandina moda de la mochila se impone: la llevan él, el presidente Clavijo quiero decir, el sempiterno Ruano y el iletrado De la Hoz. Cualquier día veo a Salvador Iglesias, secretario general del Parlamento, con mochila y entonces tendré que gritar que el conejo me riscó la perra. Salvador le prepara muy bien las intervenciones a Carolina Darias, un encanto de persona, una mujer muy agradable.

En el Ayuntamiento de La Laguna no se mueve ni una hoja. Y el PP de Tenerife no ha podido pagar las facturas de publicidad de las elecciones autonómicas. Los medios esperan en la bajadita, porque si no pagan lo anterior en éstas van dados sus aspirantes. La agencia de publicidad que les hizo la campaña niega el pago a los medios porque dice que el PP no le ha soltado la mosca. O sea, el famoso triángulo. Bueno, el círculo vicioso.

¿Quieren más? Pues tengan otra, una adivinanza: ¿quién es el holgazán que ganaba 90.000 euros al año en una empresa pública, se lo cargaron y ahora se pasa todo el día jugando al golf? Joder, qué fácil se lo he puesto a ustedes, amigos lectores. Es consorte de una conocida política. Si doy más pistas mejor que escriba el nombre. Mejor no.

Un apunte, o, mejor, dos. Patricia Hernández sube enteros en el PSOE. No crean que yo tengo nada contra ella; yerran ustedes. La conozco desde que empezó, de cuando, siendo una niña, iba a Radio Burgado en plan sociata activa. Un encanto. Y el otro, que Asier Antona, muy reforzado también en el PP, parece -en la foto- estar haciéndole una peineta a Fernando Clavijo. Impensable: están condenados a entenderse. A lo mejor se la está dedicando a Román.

(Esta sección toma el nombre de otra que se publicaba en la Vieja Vesperta, La Tarde. A ver si logramos que les interese a ustedes. Feliz domingo.)