El convenio firmado entre el Ayuntamiento de Santa Cruz y la entidad sin ánimo de lucro Provivienda, ha permitido desde mayo de 2014, el acceso a un alquiler social a 42 personas del municipio que se alojan en alguno de los 15 pisos que gestiona la entidad en la capital. Este acuerdo tiene como objetivo desarrollar el Programa de Apoyo a la Integración a través de la vivienda para Colectivos con Dificultades del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS). De esta forma, en poco más de un año, se ha logrado la inclusión de esas 42 personas que, por sus circunstancias sociolaborales, presentaban dificultades de acceso a la vivienda.

Estos datos fueron aportados por la concejal de Vivienda, Carmen Delia Alberto, en el Pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz del pasado viernes, como parte de su respuesta a la moción presentada por el Partido Socialista para crear una bolsa estable de vivienda vacía en el municipio. El PSOE apoyó su moción con el testimonio de Romina Mendoza, una joven madre que está a punto de ser desahuciada de su vivienda y que no ha podido acceder a un alquiler social. La joven, que terminó su turno de participación ciudadana entre lágrimas, contó las dificultades que estaba encontrando para acceder a un piso de alquiler.

La concejal de Vivienda recriminó al PSOE el uso partidista de la situación de la joven madre haciéndola pasar “un mal rato”. Alberto señaló que desde el Ayuntamiento se colabora con el Gobierno de Canarias para la gestión de las viviendas vacías, recordando que es la segunda administración la responsable de censar los pisos vacío de la ciudad. Así, explicó la edil, desde que se creara en 2002 la Bolsa de Vivienda Joven en la ciudad, esta oficina ha facilitado el acceso a una vivienda, en alquiler o en propiedad, a 4.760 personas en el municipio de capitalino, gestionando para ello 3.616 viviendas. Además la Bolsa de Vivienda gestiona en el municipio 582 alquileres con contrato en vigor y que permite el alojamiento de 670 personas.

En el ámbito estricto del IMAS, el concejal responsable, Óscar García, detalló que las ayudas para alquiler subirán el año que viene de los 2.400 a los 3.000 euros al año y que el presupuesto del IMAS para 2016 recoge una partida de 36.000 euros destinada a la creación de una inmobiliaria que busque una veintena de pisos vacíos para destinarlos a alquiler social.