Ha sido la semana de pactos, pero también la de las declaraciones de principios. El crispado señor Sánchez habla de diálogo, pero no quiere hablar con el PP. Habla de la corrupción ajena y olvida la propia. Habla mucho y consigue poco: el viernes, el Coletas le dijo que “no” a un pacto de Gobierno de Podemos con el PSOE si en él está Ciudadanos, que Iglesias considera que es como el PP del futuro. Todo está muy confuso y, además, empeora por días. Sánchez se las prometía muy felices, pero el viernes sufrió un revés. Pablo Iglesias Turrión se agarra a los datos del CIS: si hay nuevas elecciones Podemos fagocita al PSOE, que se desplomaría todavía más. Así que está estirando el chicle. Según esos datos, el PP sube ligeramente, Ciudadanos se queda más o menos igual y el PSOE, ya lo saben, daría un pasito atrás. El PSOE ha perdido nivel.
Cuando uno revisa las declaraciones de bienes de los políticos, no está mal de perras casi ninguno. Sólo el senador Antonio Alarcó, PP, por honrado, debe más que Alemania. Más de 700.000 euros a los bancos. Vicky la Sandinista -Victoria Rosell-gana más de 90.000 euros como magistrada -no está mal- y Pablo Iglesias es ahorrador, tiene más de 100.000 euros en el banco. ¿En bolívares, en la moneda iraní, en euros? No sé. Pregúntenle a él. Soria es uno de los más ricos, un millón o por ahí, por distintos conceptos, perfectamente lícitos, que conste. ¿A mí qué más me da que Spínola tenga tres casas que cuatro que ninguna? Pues si las tiene es porque se las habrá comprado o las habrá heredado, yo qué sé. Sólo sé que yo no tengo ninguna.
A mí me parece una ridiculez estar haciendo públicas esas cifras y esas propiedades, porque creo que es como entrar en la intimidad de las personas, pero allá ellos. En España ya saben que siempre pasamos de cero al infinito. O a callarnos todo o a contarlo todo. No hay término medio en el país de Rinconete y Cortadillo. Tampoco hemos evolucionado tanto con el tiempo: seguimos siendo tan cotillas como siempre.
El otro día, en Las Palmas, Barragán presentó a sus compañeros de Coalición Canaria un documento -bien redactado, por fin- en el que habla de volver a conquistar la calle y de recuperar el tiempo perdido en el partido. Bueno, parece el principio de la regeneración o de la refundación, no sé. Pero a esa teoría es preciso añadirle la práctica, que es mucho más difícil. Barragán anima a conquistar el ánimo de la gente. Él sabe que si finalmente se celebran elecciones en junio sería muy difícil obtener un diputado al Congreso, que esta vez salió por 200 votos. Se quedan cortos de mortadela en una residencia de ancianos y no hubiera salido Ana Oramas.
Pero está bien que tomen conciencia de su situación actual, tan precaria, y que lo pongan por escrito, en un documento de seis folios muy razonado, muy lógico y con unas conclusiones no demasiado concluyentes, pero que ya digo que pueden ser el punto de partida para el cambio.
Me vienen a dar un recado: que Fernando Clavijo no me perdona que yo haya apoyado a Paulino Rivero antes y después de aquel Consejo Político de los venezolanos que acabó con Paulino. Bueno, yo soy una persona libre que hace lo que cree que debe hacer y que se atiene a las consecuencias. Y ya me entienden. Siempre me he revelado contra la injusticia y aquello fue una injusticia, una marramucia -es una palabra venezolana, creo- que han pagado en las urnas. Pero es historia, ya no vale la pena ni recordarlo. Paulino está en su casa y ahora lo que hacen sus compañeros -Carlos Alonso, entre otros- es intentar impedir que sea presidente del Tete. Por cierto, ¿cuántas acciones tiene para conseguirlo? Porque se trata de una cuestión de número de acciones, no de maniobras políticas. Esta vez no hay, no puede haberlos, venezolanos por medio; menos mal.
¿Cuánto tiempo más sin Gobierno? No lo sé; al paso que vamos, mucho. El revés del viernes de Sánchez se le notaba en la cara. Si prescinde de Ciudadanos, como le pide Iglesias, como prescindió del PP, que ganó las elecciones, a Sánchez sólo le queda Podemos (en contra de sus barones principales) y la abstención de los independentistas, anarquistas y toda la basca. ¿Con esa tropa va a gobernar? Me da que Sánchez está más perdido que el barco del arroz, al tiempo que veo, en la tele, a algunos periodistas que viven aquí jalear al tan mencionado Sánchez. Alguno era fanático del PP en otros tiempos, Hay que ver cómo cambian las situaciones y cómo cambian los colores de las camisas.
Y poco más que contarles en esta semana de pactos. Es curioso ver cómo Sánchez pasa del optimismo al pesimismo en 24 horas. No se da cuenta de que el Coletas le está tomando el pelo, lo tiene más confundido que la noche a Dinio. Pedro Sánchez tiene cierto parecido con Dinio en la forma de expresarse. No hay duda de que el cubano es un buen maestro. Mientras, Rajoy ha mandado a su tropa a decir que él es inamovible y que no hay más candidato que él y que él sigue siendo el bastión que nos sacó del atolladero. Como han visto, una bonita semana. Feliz domingo.