JOSÉ L. CONDE | Arona
El alcalde de Arona, José Alberto González Reverón, ha querido salir al paso de las críticas del portavoz socialista en el Ayuntamiento, José Julián Mena, quien señaló en una entrevista publicada en este periódico que “es incomprensible que un alcalde condenado se aferre al cargo”. González Reverón dice que no tiene ningún apego al puesto de trabajo y que “hay que dejar seguir los procedimientos judiciales”. El alcalde reconoce que sobre él pesa una condena de cuatro años y medio de inhabilitación para cargo público por un delito de prevaricación, que está recurrida y, por tanto, el portavoz socialista, lo que tiene que hacer es respetar la presunción de inocencia y el procedimiento judicial, a la vez que esperar a que los tribunales confirmen el fallo judicial.
En este sentido, señala que pedir el cese es muy fácil, pero que José Julián Mena también debería solicitar lo mismo para otros alcaldes y concejales socialistas que se encuentran en la misma situación judicial.
Con respecto a las críticas de Mena sobre la gestión como alcalde del político nacionalista, señala que “lo que hay que hacer es mirar cómo era el municipio hace diez o 12 años y comprobar la profunda transformación experimentada tanto desde el punto de vista social, como cultural, en lo que somos un referente, en jardines y en promoción turística. Es decir Arona ha ganado en calidad de vida”. Aunque reconoce la difícil situación económica por la que atraviesan los Ayuntamientos, no solo los canarios, “Arona está afrontando los pagos de forma correcta, gozamos de una buena salud financiera, no tenemos problemas para afrontar los pagos a proveedores o a empresas que prestan servicios públicos o las nóminas”.
“Aquí hay dos Aronas: una, la real, la que percibo como alcalde y los ciudadanos que me han dado un respaldo mayoritario histórico en este municipio; y otra, la del portavoz socialista, que ha sacado los peores resultados del Partido Socialista en todas las elecciones”.
Además señala que Mena, desde la oposición, no ha realizado sino “una política de crispación y de confrontación cuando ahora lo que toca es discutir y debatir las ideas para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y mejorar los barrios”.
González Reverón recuerda que en el último pleno el Ayuntamiento acordó abrir una investigación a Mena por si cobró indebidamente dinero procedente de las subvenciones a partidos políticos durante los años 2003-2007. Además a estos posibles delitos de malversación o prevaricación se pueden unir los de fraude a Hacienda. También el pleno le pidió que presentara su vida laboral para demostrar si estuvo o no contratado por una empresa que presta servicios al Ayuntamiento, situación ilegal e incompatible, según Reverón. “Con lo cual lo más parecido a corrupción es lo que ha practicado el portavoz socialista, no la renovación de dos contratos, por lo que me condenaron”, dijo.